Los Emiratos Árabes Unidos hospedarán la 28° Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP 28) entre el 30 de noviembre y el 12 de diciembre. Los católicos tendremos una nueva oportunidad para cuidar la creación y lograr un acuerdo para el mundo. 

Pero ¿qué es la COP 28?, ¿cuál es su historia? y ¿por qué es tan importante?

La sigla COP significa Conferencia de las Partes. Las “partes” son los signatarios de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC), un tratado realizado en 1994, integrado por 197 partes (196 países y la Unión Europea). Un año después, en marzo de 1995, se celebró la primera COP en Berlín, Alemania.

La conferencia de 2023 será la 28ª reunión de las Partes. Este año se celebra en Dubai y queremos enviarle un mensaje especial a su presidente, el Dr. Sultán Ahmed Al Jaber: ¿te unes a firmar esta petición?

Las conferencias de las Naciones Unidas sobre el cambio climático se encuentran entre las reuniones internacionales más importantes del mundo. Las negociaciones entre los gobiernos son complejas y en ellas participan funcionarios de todos los países, así como representantes de la sociedad civil y de los medios de comunicación social. Lee más sobre la historia de las COPs aquí.

¿Qué pasará en Dubai?

Luego de los  “acuerdos insuficientes” de la COP 26 en Glasgow, y de los “resultados decepcionantes” en Egipto en la COP 27, este año se busca acelerar la acción hacia los objetivos del Acuerdo de París y la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático.

En Dubai estará presente una delegación del Movimiento Laudato Si’. Nuestra casa común y nuestra familia común están sufriendo. La emergencia climática está provocando la subida de los mares, un planeta más cálido y un clima más extremo.

Está devastando las vidas de nuestros hermanos y hermanas más pobres. Al mismo tiempo, los biólogos estiman que estamos llevando a las especies a la extinción a un ritmo entre 100 y 1.000 veces superior al habitual. «No tenemos ese derecho» (LS 33). 

Considerando los diversos riesgos derivados de la crisis climática, se busca en esta conferencia que los países presenten objetivos ambiciosos de reducción de emisiones para el 2030 (NDC, por sus siglas en inglés), y mantener en 1.5 grados el incremento de la temperatura, para alcanzar el nivel cero a mediados de siglo.

Es nuestra responsabilidad como católicos alzar la voz de los más vulnerables e incidir por ellos. Es necesario y urgente trabajar juntos para conseguir estos objetivos y convertir las ambiciones en acciones, acelerando la colaboración entre los gobiernos, las empresas y la sociedad civil. Es por ello que como católicos debemos alzar la voz para cuidar nuestra casa común.