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La Provincia de los Jesuitas de Australia acoge la Conferencia Internacional Ecoespiritual Ignaciana (IIEC2022) en línea del 25 al 30 de abril, en el marco del 500 aniversario de la conversión de San Ignacio. El Dr. Peter Saunders, del Comité Organizador de la conferencia, responde a nuestras preguntas clave:
El tema de la conferencia es «Vivir con la Tierra: Nuestra conversión ecológica a través de estar con Dios en la naturaleza». ¿Qué significa eso?
El Papa Francisco, en Laudato Si’, hace un llamado a la conversión de nuestros corazones -una conversión ecológica- mediante la cual las personas encontrarán a Dios en TODA la creación. Esta conferencia es una experiencia de inmersión en la que se invitará a los participantes a pasar un tiempo contemplativo en la Naturaleza durante cada uno de los cinco días de la conferencia. Creemos que es la experiencia de los participantes en la Naturaleza la que abrirá sus corazones a la Presencia que es Dios allí con ellos. Aquí hay un breve enlace de vídeo para presentar la conferencia: Bienvenidos al IIEC 2022.
Pero no se trata de una «conferencia» tal y como la concebimos habitualmente. Este evento tiene el potencial de unir a la gente en oración y acción en todo el mundo, ¿verdad? ¿Cómo va a funcionar y cómo puede participar la gente?
En una conferencia habitual, hay ponentes principales cada día y luego muchos talleres, con el objetivo de adquirir nuevos conocimientos y comprensión de temas concretos. Esta conferencia es una experiencia de inmersión, y habrá un orador principal cada mañana que tocará diferentes temas relacionados con Laudato Sii, incluyendo:
- Laudato Si’ y la conversión ecológica
- Cambio climático
- Espiritualidad aborigen
- Proyectos de acción – Regeneración natural gestionada por los agricultores en África
- Plataforma de Acción Laudato Si
Tras los discursos de apertura, los participantes compartirán su respuesta al tema del orador en pequeños grupos. A continuación, se les invitará a pasar un tiempo en la naturaleza cada día. Les daremos algunos ejercicios espirituales en la naturaleza cada día para que los lleven consigo. Al final del día, volverán a su grupo para compartir su experiencia de ese día.
También se invitará a los participantes a compartir parte de esto en el grupo de Facebook del IIEC2022 con otros participantes de todo el mundo. Grabaremos las sesiones de la mañana y las pondremos en el canal de youtube del IIEC2022, para que quienes se reúnan en diferentes zonas horarias del mundo puedan verlas juntos a su hora local. Actualmente, tenemos participantes de 13 países de todo el mundo, entre ellos: Kenia, Irlanda, India, Filipinas, Malasia, Hong Kong, Camboya, Singapur, Indonesia, Timor Oriental, Nueva Zelanda, Canadá y Estados Unidos. Aquí hay un pequeño enlace de vídeo que explica cómo funciona la conferencia: IIEC2022 – ¿Qué es?
¿Por qué centrarse en la eco-espiritualidad en general?
Durante mi vida, la teología católica que recibí se centraba en mi relación humana con Dios. Me dijeron que había nacido a imagen y semejanza de Dios. No me dijeron que Dios está presente en TODA la creación: en cada río, en cada montaña, en los océanos, en cada planta, en cada animal, en cada ave, en cada insecto, en cada pez. Teilhard de Chardin, jesuita, paleontólogo y teólogo, nos invitó a una nueva apreciación de Dios en toda la materia, en la evolución, en la vida. «Por medio de todas las cosas creadas, sin excepción, lo divino nos asalta, nos penetra y nos moldea. Lo imaginábamos como lejano e inaccesible, cuando en realidad vivimos impregnados de sus capas ardientes». En los Ejercicios Espirituales de San Ignacio de Loyola, el fundador de los jesuitas, invita al que hace los ejercicios a ese encuentro con Jesús, que nos ama en íntima amistad. Esto produce una conversión del corazón de la persona que hace surgir grandes deseos de vivir su vida de manera diferente. Eso marca la diferencia.
En Laudato Si’, el Papa Francisco, también jesuita, nos invita a otra conversión -una conversión ecológica- en la que nos encontramos con la intimidad del Cristo Cósmico en toda la Tierra. Creo que este encuentro con el Cristo Cósmico en todos los aspectos de nuestra Madre Tierra transformará los corazones de las personas y les llevará a desear cuidar de ella de nuevas maneras.
¿Cómo describiría la relación de San Ignacio con la creación de Dios?
La Compañía de Jesús está celebrando actualmente el 500 aniversario de la conversión de San Ignacio de Loyola. El Superior General de la Compañía de Jesús, el P. Arturo Sosa SJ, inaugurará la conferencia. Nuestra conferencia trata de invitar a los participantes a una nueva conversión – una conversión ecológica. Ignacio fue un hombre de la tierra que creció en la zona rural de Loyola, en el País Vasco, en el norte de España. Estuvo en contacto con la naturaleza toda su vida. Tras su conversión en 1521/2, sólo viajaba a pie. Atravesó Europa a pie en varias ocasiones, cuando no había carreteras bien hechas ni electricidad, por lo que no había iluminación en el camino. Daba por sentada su conexión con la naturaleza, que formaba parte de su vida en el siglo XVI. Una de las primeras biografías de Ignacio, escrita por alguien que lo conoció bien, Ribadeneira, explica: «Le vimos con frecuencia aprovechar la ocasión de las cosas pequeñas para elevar su mente a Dios, que hasta en las cosas más pequeñas es grande. De ver una planta, un follaje, una hoja, una flor, un fruto cualquiera, de la consideración de un gusanillo o de cualquier otro animal, se elevaba por encima de los cielos y penetraba en el pensamiento más profundo.»
¿Qué estaría haciendo San Ignacio ahora, en medio de la emergencia climática y la crisis ecológica?
Ignacio estaría hoy muy preocupado por cómo estamos tratando a la creación de Dios. Según Nadal, amigo íntimo de Ignacio, se dio cuenta de que «no dejaré de recordar esa gracia que tenía en todas las circunstancias, mientras trabajaba o conversaba, de sentir la presencia de Dios y de saborear las cosas espirituales, de ser contemplativo incluso en medio de la acción; él solía interpretar esto como buscar a Dios en todas las cosas». Si hemos de encontrar a Dios en todas las cosas, entonces tenemos la responsabilidad de cuidar todas las cosas, especialmente la Madre Tierra. A él le preocuparía mucho el daño que estamos haciendo a la Tierra. Para Ignacio, los jesuitas están llamados a ser Contemplativos en Acción. Así que, a medida que nuestros corazones se transforman a través de la conversión ecológica, somos llamados a la acción para cuidar de nuestra casa común.
«El universo se desarrolla en Dios, que lo llena todo. Entonces hay mística en una hoja, en un camino, en el rocío, en el rostro del pobre» (LS 233 ).
Únete a la Conferencia Internacional Ecoespiritual Ignaciana, que se celebra en línea del 25 al 30 de abril.