Roma, 3 de junio de 2021
En vísperas de dos cumbres vitales de la ONU, los líderes del Vaticano animan a los católicos y a sus instituciones a que empiecen a planificar ahora cómo van a celebrar el Tiempo de la Creación a finales de este año.
Monseñor Bruno-Marie Duffé, Secretario del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral del Vaticano, invitó recientemente a todos los católicos a unirse a sus hermanas y hermanos cristianos para participar en la celebración ecuménica anual de oración y acción por nuestra casa común.
En una carta, Duffé destacó el bien potencial que los 1.300 millones de católicos del mundo pueden aportar durante el Tiempo de la Creación, que comienza el 1 de septiembre, Jornada Mundial de Oración por el Cuidado de la Creación, y termina el 4 de octubre, fiesta de San Francisco de Asís, el santo patrono de la ecología tan querido por muchas confesiones cristianas.
El Tiempo de la Creación llega justo antes de que los líderes mundiales se enfrenten a la oportunidad de proteger la creación de Dios durante los próximos años.
En noviembre, en la 26ª Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP26), los países deben anunciar sus planes para cumplir los objetivos del histórico acuerdo climático de París. En la Conferencia de la ONU sobre la Biodiversidad, prevista para octubre en China, los líderes mundiales tendrán la oportunidad de establecer objetivos significativos y sólidos para proteger nuestra casa común.
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«Este Tiempo de la Creación será también un momento crítico para que los católicos alcen las voces de los más vulnerables y aboguen en su nombre antes de dos importantes cumbres», escribió Duffé.
Invitó a los católicos a firmar la petición «Gente sana, planeta sano», lanzada recientemente por el Movimiento Católico Mundial por el Clima, que pide a los católicos que se unan urgentemente y exijan una acción audaz para proteger la creación de Dios.
Duffé también compartió las palabras del Papa Francisco de hace un año, cuando Su Santidad expresó su alegría por la participación de los católicos en el Tiempo de la Creación.
«Nos alegramos también de que las comunidades de fe se unan para crear un mundo más justo, pacífico y sostenible. Nos alegra especialmente que el Tiempo de la Creación se esté convirtiendo en una iniciativa verdaderamente ecuménica. Sigamos creciendo en la conciencia de que todos vivimos en una casa común como miembros de una única familia», dijo Su Santidad.
Por último, Duffé invitó encarecidamente a los obispos a que ayuden a todos los católicos a comprender que el cuidado de la creación de Dios es la forma en que pueden vivir su fe.
«Animamos también a los obispos y a los organismos eclesiales a hacer declaraciones para sensibilizar sobre el Tiempo de la Creación, ayudando a los fieles a darse cuenta de que ‘vivir la vocación de ser protectores de la obra de Dios es parte esencial de una existencia virtuosa, no consiste en algo opcional ni en un aspecto secundario de la experiencia cristiana.’» (Laudato Si’ 217), escribió Duffé.
Este año, durante el Tiempo de la Creación, la familia cristiana mundial se une en torno al tema «¿Un hogar para todos? Renovando el Oikos de Dios».
El Rvdo. Dr. Chad Rimmer, Presidente del Comité Directivo del Tiempo de la Creación Ecuménico y Ejecutivo del Programa de Teología y Práctica Luterana de la Federación Luterana Mundial, dijo: «El tema del Tiempo de la Creación se centra en el hecho de que la Tierra pertenece a Dios, y cada amada criatura pertenece a este hogar común (Salmo 24:1). La palabra griega para «hogar» es oikos. Al fundamentar nuestro tema en el concepto de hogar, apuntamos a la red integral de relaciones que sostienen el bienestar de la Tierra.
«Tenemos que garantizar un hogar justo para todas las criaturas para que la vida en nuestro planeta prospere, y eso requiere soluciones ecológicas, económicas y tecnológicas que estén arraigadas en una visión fiel de la justicia para la dignidad de cada criatura. Esperamos que este Tiempo de la Creación fortalezca la unidad ecuménica para cuidar de la creación de manera que se garantice que todas las criaturas tengan un hogar para florecer y participar en la renovación del oikos de Dios».
Analisa Ramsahai, Coordinadora del Programa Regional del Instituto Franciscano para el Desarrollo Personal y Familiar, un ministerio de las Hermanas de la Madre Dolorosa (SSM), y miembro de la Junta Directiva del Movimiento Católico Mundial por el Clima, dijo: «Hogar significa una vivienda segura, una morada donde podemos habitar en armonía en una relación simbiótica en comunión con los demás y con el entorno que nos rodea. El tema de este año nos recuerda que la Tierra es nuestra casa común donde viven todas las criaturas de Dios, bajo un mismo techo. Cada criatura que habita en la Tierra, incluidos los seres humanos, desempeña un papel importante en la salud del ecosistema, su biodiversidad y la salud de la sociedad humana».
Puede encontrar más información en SeasonofCreation.org/es.