La Asamblea Eclesial de América Latina y el Caribe, celebrada este 21 a 28 de noviembre de 2021 en la Ciudad de México, es la primera asamblea continental en la historia, reuniendo laicos, religiosos y clérigos; jóvenes y adultos, desde Canadá hasta Argentina. 

Los grupos de discernimiento terminaron sus trabajos este sábado, de los que surgieron “12 desafíos”, a los que se dará seguimiento de manera local durante 2022.  

Los 12 desafíos son:

  1. Reconocer y valorar el protagonismo de los jóvenes en la comunidad eclesial y en la sociedad como agentes de transformación.
  2. Acompañar a las víctimas de las injusticias sociales y eclesiales con procesos de reconocimiento y reparación.
  3. Impulsar la participación activa de las mujeres en los ministerios, las instancias de gobierno, de discernimiento y decisión eclesial.
  4. Promover y defender la dignidad de la vida y de la persona humana desde su concepción hasta la muerte natural.
  5. Incrementar la formación en la sinodalidad para erradicar el clericalismo.
  6. Promover la participación de los laicos en espacios de transformación cultural, político, social y eclesial.
  7. Escuchar el clamor de los pobres, excluidos y descartados.
  8. Reformar los itinerarios formativos de los seminarios incluyendo temáticas como ecología integral, pueblos originarios, inculturación e interculturalidad y pensamiento social de la Iglesia.
  9. Renovar, a la luz de la Palabra de Dios y el Vaticano II, nuestro concepto y experiencia de Iglesia Pueblo de Dios, en comunión con la riqueza de su ministerialidad, que evite el clericalismo y favorezca la conversión pastoral.
  10. Reafirmar y dar prioridad a una ecología integral en nuestras comunidades, a partir de los cuatro sueños de “Querida Amazonía”.
  11. Propiciar el encuentro personal con Jesucristo encarnado en la realidad del continente.
  12. Acompañar a los pueblos originarios y afrodescendientes en la defensa de la vida, la tierra y las culturas.

Sin embargo, el Movimiento Laudato Si’ y otras 14 organizaciones eclesiales como la CLAR, la CIEC, Iglesias y Minería, REMAM, SIGNIS ALC, REPAM entre otras, consideraron urgente reforzar nuestro compromiso en el cuidado de la casa común, que no es otro que el compromiso con la vida que Dios nos encomienda y ha sido mensaje desde el Papa Juan Pablo II, Benedicto XVI hasta nuestro actual Papa:

“El tiempo se agota; esta ocasión no debe desperdiciarse,  para que no tengamos que enfrentarnos al juicio de Dios por nuestra incapacidad de ser fieles administradores del mundo que nos ha confiado” Papa Francisco, 2021.

La carta fue entregada en físico (en papel reciclado) a los asambleístas presenciales junto con una artesanía mexicana. 

¿Abriremos nuestros oídos a la voz del Espíritu de Dios que nos habla a través de nuestros pastores…y del mismo pueblo, rostros concretos que claman en la inundación de sus casas, en el dinero que nunca les alcanza, en los campos arrebatados por grandes empresas, en la mujer que no puede amamantar a su hijo? 

Porque “todo está interconectado” y la injusticia ecológica está causando injusticias sociales. Seguir trabajando en nuestra conversión ecológica (Juan Pablo II) para responder a Dios.