El Papa Francisco preocupado, una vez más, por fuertes catástrofes naturales

Imagen ilustrativa por Parij Photography (pexels.com)

“Expreso mi cercanía a las poblaciones golpeadas en los días pasados por calamidades naturales, pienso en particular en el sudeste de Madagascar, flagelado por una serie de ciclones, y en la zona de Petrópolis en Brasil, devastada por inundaciones y deslizamientos de tierra. El Señor acoja a los difuntos en su paz, consuele a los familiares y sostenga a los que realizan las tareas de rescate”.

Con estas palabras el Papa Francisco concluyó el rezo del Ángelus del domingo 20 de febrero, atento una vez más a las catástrofes que la crisis climática está provocando en distintas partes del mundo.

Asimismo, envió un telegrama especial a Madagascar, firmado por el secretario de Estado Vaticano, cardenal Pietro Parolin, el Santo Padre lamentó “con gran dolor” los daños causados en la Isla.

¿Esta situación te preocupa? A nosotros también, por eso queremos actuar con la petición “Planeta sano, gente sana”. Fírmala ahora. 

Miles de católicos ya se han comprometido de cara a la próxima Conferencia de las Naciones Unidas sobre Biodiversidad (COP 15), que tendrá lugar en China. Tenemos la responsabilidad de persuadir a los líderes mundiales que tienen el poder de tomar acción urgente en favor de nuestra casa común. 

En la misiva dirigida al presidente de la República de Madagascar, Andry Rajoelina, el Santo Padre expresó “su oración en comunión con los afectados por estos desastres naturales”, y manifestó “su profunda solidaridad” con los afectados de esta tragedia y reza por las víctimas y la sanación de los heridos.

Ana, Batsirai y luego Dumako, fueron tres ciclones que llevaron muerte y destrucción a la isla de Madagascar en el espacio de unas pocas semanas. Causaron al menos 120 personas fallecidas, y cientos de miles se vieron afectadas de diversas maneras, desplazadas y sumidas en la inanición. 

Según el Programa Mundial de Alimentos, más de 1,6 millones de habitantes de la isla están en peligro porque el agua del mar invadió los campos de arroz, destruyendo la cosecha, principal fuente de sustento.

Defiende a los más vulnerables: Firma la petición «Planeta sano, gente sana»

En la isla africana, según informó Vatican News, son numerosos los testimonios de los misioneros que trabajan para ayudar a los que lo perdieron todo. Mientras se intenta reconstruir algunas zonas, la costa oriental vuelve a estar en alerta por la llegada del ciclón Emnati en los próximos días. 

Además, muy cerca de Río de Janeiro, en Brasil, la ciudad de Petrópolis sufrió fuertes inundaciones la semana pasada, provocando al menos 120 muertos, más de 200 desaparecidos y más de 80 casas destruidas, con centenas de familias evacuadas que han quedado sin nada. 

Como lo ha hecho en numerosas oportunidades, el Santo Padre se preocupa por las graves consecuencias que el cambio climático está provocando y que en particular afectan a los más pobres y vulnerables. Si a ti también te preocupa, firma ahora la petición “Planeta sano, gente sana”.